Todos en algún momento hemos estado expuestos a las críticas de los demás, la diferencia entre dejarse afectar o no, está en el manejo que cada quien le de a este tipo de situaciones. Las siguientes son recomendaciones para aprender a que las críticas no hagan estragos en nuestra autoestima, y al contrario, convertirlas en fuentes de aprendizaje y fortalecimiento interior.
Es importante entonces, no sólo aprender a recibir las críticas, sino a sacar partido de ellas. Las siguientes son cinco pasos que ayudarán a lograrlo:
- Identificar qué hay detrás de la crítica.
- No reaccionar inmediatamente.
- Rescatar lo bueno de la crítica.
- Enterrar la crítica.
- No personalizar cada desacuerdo o conflicto.
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3. Rescatar lo bueno de la crítica.
Las críticas conocidas como “destructivas” pueden tener algo de “constructivas”, hay que aprender a captar la esencia y ser los suficientemente maduro y sincero consigo mismo para darse cuenta cuándo una crítica ha tocado uno de nuestros puntos débiles.
Lo más sensato en estas situaciones, es no ponerse a la defensiva y reconocer el error, ya con este paso se alivia ese peso interior que esto puede acarrear.
El paso siguiente será dejar este episodio atrás y no dramatizar.